lunes, 26 de enero de 2015


Hoy no hay placer. Es inconcebible.
No hay placeres que valgan. No hay placer que llene el vacío de no saber a donde ir. No existe terapia que logre reanudar sentires, no la hay. 
Existen soluciones artificiales que venden el paraíso a quien esté dispuesto a comprar. A quien se encuentra indispuesto a crear. 
No hay placeres que causen dolor profundo, como aquel de las angustias más cercanas a la felicidad. No hay placer que llene el vacío de no saber qué es la felicidad. 
Hay besos como hay flores, abundan, se encuentran por doquier, se regalan, se venden por doquier. Las más valiosas son aquellas que son compradas en tiendas, de plaza, de esquina. 

No hay placeres que coman más de lo habitual, sin engordar, sin dar de qué desear. No hay placer que evite engordar. 
De soberbia, de egolatría. Se crean vicios intransigentes. Que no quieren más, que nunca piden más. Sin embargo hay quienes están dispuestos a dar más. Quienes no cuestionan la cifra, real ... imaginaria. 

miércoles, 21 de enero de 2015



Hoy más que ayer te cargo en mi consciencia, con la misma preocupación de siempre.

domingo, 18 de enero de 2015

Quizá podría decirte cosas de belleza pura, estéticas, pulcras
Yo prefiero hacerlo desordenado
Desnudarme de estructuras,
acariciarte suave entre palabras
Que están ahí
libres a ser interpretadas,
propensas a ser violadas.
Por él,
por ella
Cualquiera
Cualquiera puede tocarlas,
sin saber que han estado,
que fueron
Y hoy solo se han resignado
a ser sin ser interrumpidas
Sin poder interrumpirse a ellas mismas
Palabra desnuda
Desvirtuada

sábado, 17 de enero de 2015

Princesa.

Hay preguntas que no precisan respuesta. Que ni siquiera la buscan. Que no van de la mano con certezas. Yo hoy me siento frente a ti, querida, con la hoja en blanco. Con el alma llena de recuerdos y con las preguntas desbordándose de entre las costuras que, mal remachadas, intentan contener los ánimos de las respuestas arrinconadas. Te pienso así como te recuerdo, de ojos tristes y de ánimos muy alegres, no puedo evitar que se llenen mis ojos de lágrimas. Recordarte. Así como te conocí. De ojos tristes y de ánimos alegres.

jueves, 8 de enero de 2015

Hojas olvidadas...

Could you tell me the exact moment when you found out you were mad, when everything around you made no sense anymore? And the answers just spat out more questions. Could you remember the lies you lived by? And still live by because they´re just too deeply carved into your skin and burnt into your soul to forget. You are who you are because of these lies you hate. You live by a code that wasn´t handmade for you, in a life that became just one more.

Am I as mad as you? Or have I just regained the knowledge that was snatched from me at birth? Have you done the same? Or have we just coincidently found each other, too mad and fucked to know the difference between your shadow and my reflection?

You would see I´m a little saner than you if you looked me in the eye, if you could only bear to do so you would see it.  I´m thirteen years too late and you still open the door. Could you answer me why? I don´t really need to be here, I just thought it would be a nice gesture to drop by to see your tattered skin; your gorgeous eyes.  Make my way back home through those milky eyes.

But I can´t leave now I´m too high on the smoke that seeps from your skin, soaked in tobacco petals and opium seeds. Feeding the smell that dwells upon your sex, is your sweet and sour hormones that attack anyone willing to come close. I can smell you all too well, and those scents don’t leave questions in the air. They answer every single one I´ve had since I can remember. And you, indifferent, insane don´t give a damn.

I´ve fucked around with your presence so many times, but your presence lacks your taste, your tongue, it lacks everything but orgasms, it lacks your fire lit chest.  I´m going around in circles. Licking everything around; smelling every rose in town; and it´s just one I haven´t found, the one I´m crazy for.  Could you deliver me, lay me down on the front step, before her door? I´d take a number, I swear. But there is no number. There is no door. There are no roses, no reflection, and as you were imagining, I´m already home. 

viernes, 2 de enero de 2015

La soledad desde mí.


Sufro de a poco... la idea de la soledad. 
La sufro desde que sentí su peso que no deja respirar, que asfixia como cuando vas nadando más y más profundo hasta que ya no se siente más que presión, y extrañamente tranquilidad. Es confuso. Es como si supieras que no queda más que nadar de regreso a la superficie, pero parece tan difícil... tan innecesario. Preferirías quedarte ahí en medio de toda esa tranquilidad agobiante, pero sabes que no puedes o más bien no debes si lo que quieres es sobrevivir. Sobrevivir se convierte en la necesidad, rebasa los limites del deseo o de lo ideal. Sobrevivir la soledad es lo que, creo,  nos vuelve seres sociales; lo que impide que nos aislemos y creamos que podemos sobrevivir solos. La soledad ha unido a los seres humanos desde tiempos remotos y nos sigue uniendo hasta el día de hoy. La soledad es la razón, la relaciones, el pretexto, el medio. Sufro, sufro saberme inmersa en la falsedad de lo que quiero. Me siento ajena a mi misma, me siento agobiada por la necesidad de no-estar sola. Ese sentir se multiplica cuando me encuentro irremediablemente abandonada por las relaciones que creí construir. Aquellas que me mantenían acompañada en ese sendero interminable de la soledad. Aquellas que desde mi sentir, eran como aliarse con ella, aliarse y así triunfar sobre ella. Me encuentro hartada de saberme derrotada, de saberla a ella siempre triunfante. Hoy estoy nadando más y más profundo, creyendo cada vez más que no es necesario nadar de regreso, que es necesario nadar contra ese instinto de supervivencia que tanto agobia al alma. 


*La soledad es un tema que nadie toca, del que nadie gusta hablar como una platica cotidiana y amena... me gustaría saber lo que alguien más cree de la soledad.